Audi y el preparador ABT, con el que ya ha colaborado en varias ocasiones, se unen otra vez para dar un retoque al primer diesel de la gama S, el SQ5.Denominado como Audi SQ5 ABT Sportsline, incorpora cambios estéticos y mecánicos. A nivel visual unas llantas específicas a elegir entre 20, 21 o 22 pulgadas, nuevo paragolpes delantero y parrilla, pasos de rueda ensanchados y una renovada zaga con escape doble gemelo.
El motor 3.0 V6 biturbo también se ha modificado. De los 313 CV originales ha pasado a 360 CV, y aumenta de los 650 Nm de par máximo para llegar hasta los 700 Nm. Mantiene la misma caja de cambios tiptronic de ocho relaciones y la tracción integral quattro, y como opción se ofrece una rebaja de la altura libre al suelo.
Todavía no hay datos de sus prestaciones, aunque si el modelo de serie hace el 0-100 en 5,1 segundos y tiene una velocidad máxima limitada a 250 km/h, por lógica, o eso es lo que esperamos, el Audi SQ5 ABT Sportsline mejorará estos registros.
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